Más allá del espacio de venta física, todos los negocios necesitan un almacén donde guardar sus materias primas, sus herramientas, los productos acabados, sus materiales o los documentos en papel. Incluso, los ecommerce o tiendas online que no necesitan una tienda de venta física se ven obligados a comprar o alquilar un almacén donde guardar su stock. Pero, ¿cuáles deben ser las características de un almacén? ¿Qué tipo de almacén necesitas?
En este artículo te explicaremos las principales características de un almacén. Descubre todo lo que debes saber al comprar o alquilar un almacén donde guardar las posesiones de tu empresa de forma segura.
Comprar o alquilar un almacén es una decisión que debes estudiar detenidamente. Valora sus pros y sus contras antes de tomar una decisión.
Si últimamente has estado pensando en esta opción, es importante que te asegures que cuenta con las siguientes características:
Puede que la seguridad sea una de las más importantes características de un almacén. Si el almacén es de compra, la seguridad del mismo recaerá sobre ti. Deberás instalar una alarma y una buena cerradura de seguridad.
Si te decantas por alquilarlo, la seguridad dependerá de la empresa propietaria. Te recomendamos alquilar un almacén en una compañía que asegure la máxima seguridad física y electrónica: cámaras de vigilancia, candados de máxima seguridad y radares volumétricos. Puedes echar un vistazo a la empresa Trastering, la cual cuenta con contenedores ISO seguros en la provincia de Barcelona.
Es importante que alquiles un almacén que cubra tus necesidades. Calcula cuánto espacio vas a necesitar para saber el tipo de almacén que tu negocio requiere. Cuando analices las características de un almacén, asegúrate que el tamaño será suficiente para todo lo que tienes pensado guardar.
Muchas compañías de almacenes de alquiler ofrecen espacios de distintos tamaños. De esta forma, si el almacén se te queda pequeño puedes cambiarte a uno más grande.
Otra de las características de un almacén que debes contemplar es la accesibilidad al mismo. Recuerda que muchas de las veces transportarás material pesado, por lo que el acceso al almacén debe ser lo más cómodo posible.
En ese sentido, intenta que el almacén se encuentre en una planta baja y que puedas aparcar frente a él. Así, te será mucho más fácil introducir o sacar material de forma recurrente.
Además, trata de que el almacén se encuentre cerca de la ubicación de tu negocio, trabajo u oficina.
Por último, también es muy importante asegurarte que el almacén no tenga humedades y se mantenga seco. De lo contrario, el material guardado se podría dañar.
Algunas compañías de alquiler de almacenes utilizan contenedores marítimos que, además de ser estancos y secos, protegen tus bienes de posibles inundaciones o incendios.
Teniendo en cuenta estas cuatro características de un almacén, te asegurarás dar con el almacén ideal.
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